martes, 15 de enero de 2019

أمي


كأن شوقي فيه إحتراق
كأن إحتراقي فيه شوقا
أجوب أرضا باعدت بيننا
و ها أنا في محراب حبك أبقى
قهوة الصباح من يديك أمي
نكهة الحب معتقة
وأنا في ملكوت عينيك أرقى
من لي بقلبك الناظر
من لي بقلبك الطاهر
من لي بأنفاسك تشيع عبقا
في حضرتك مولاتي
أعود طفلا
سنبلة زرع في حقلك
نقطة بعيدة كشمس المغيب
تزين الأفق
قطرة ماء تتدفق إلى صدرك
وميض ضوء خافت
تجننه الأقدار
يقتات الليل على أوجاعي
و يترك  لي الفتات والأرق
إبتسمي سيدتي لتحيي حبك
فحبك كالعنقاء أزلي
أنت من خلقته في قلبي
وأنت من تعيدين الخلق 

sábado, 12 de enero de 2019

viernes, 11 de enero de 2019

El nogal

A veces podemos pasarnos años sin vivir en absoluto, y de pronto toda nuestra vida se concentra en un solo instante. (Oscar Wilde)

Tristemente, reconozco que soy incapaz de reconstruir gran parte mi infancia, solamente me vienen ráfagas de luces, imagines en blanco y negro. Pero, nunca una parte completa. Siempre la he querido recrear aunque sea una etapa corta para arrastrarla al presente. Me pregunto, por que? Es posible que sea algo similar a aquello que experimentan las persona s adoptadas, cuando siempre quieren encontrar algo sobre los padres biológico, y no precisamente para volver a vivir con ellos. Sino simplemente, a nadie le gusta el sentimiento que produce la perdida de algo o alguien. Tampoco nos gusta vivir la situación de perdida o el hecho de ser anónimos.
La recuperación de los objetos o recuerdos es un viaje que (comporta)contrae riesgos. No todos, estamos dispuestos a pagar por algo que nos inquieta, aunque no tenga nada de valor. Mas allá de la parte misteriosa de saber que es o que existe. Viajar al pasado, quizás puede ser fascinante,porque retrocediendo en el tiempo logramos darle sentido a cosas que forman parte de nuestra vida. Incluso puede ser una nueva oportunidad para restaurar todo lo que nos ha hecho sufrir o nos ha atormentado. Ya que sabemos que nuestra memoria nunca ha sido una fiel grabadora de los hechos. Sino siempre suele añadir elementos, y censurar otros. tal vez, de manera consiente podemos influir para relativizar los daños, o minimizar las perdidas,y como no! inventar acontecimientos que nunca han existido para hacernos sentir felices.
Viajar hacia atrás, a veces es incomodo, como el hecho de ocupar los asientos del tren que dan la espalda a la locomotora, a veces, la sensación de mareo es inevitable. Pero, es importante recordar el objetivo del viaje, y que mientras tanto hay que amortizar cada momento, porque no se trata de perder algo para recuperar otro.
Para viajar en el tiempo, justamente no se necesita contar el tiempo. Porque, la angustia del reloj, las canas que aparecen en nuestro pelo, las arrugas... nos hacen correr más, para llegar al mismo sitio donde van todos los mortales. Por eso, nos puede interesar mas alcanzar el objetivo que el tiempo que tardemos en hacerlo.
Mi historia empieza con una imagen de mi abuela paterna que me sujetaba en brazos, cerca de un nogal situado justo al lado de una casa de barro, deduzco que era su casa y también deduzco que me edad no superaba los tres años. Mi abuela era guapísima, o eso siento ahora al recordarla, de hecho no tengo ninguna foto suya. A demás el recuerdo en sí es borroso. Ella cogía nueces, las cascaba y me daba. Eran las mejores nueces que he probado en mi vida. O sea también pienso que era así. El nogal era muy grande y el color verde de sus hojas parecía mas intenso de lo normal. Quizás me falten muchos detalles para recrear la escena a la perfección. Sin embargo, cada vez que viajo a este momento mi invade un huracán de ternura. Es solo un momento. Pero vale por una vida!

Alguna vez he llegado a pensar que es un momento inventado, que me hace vibrar por el hecho de revivir un sentimiento tan puro. Tampoco me importa mucho analizar este evento para saber su naturaleza y veracidad. Sino, me maravilla el impacto que genera en mi. Sera posible que nosotros somos capaces de construir un relato y dotarle de alma con aquello que sentimos. En todo caso, no creo que nadie pueda negarme que los momentos de ternura son los mas difíciles de falsificar.

Quiero creer que la imagen de la abuela,el niño y el nogal ha sido una semilla que brota cada vez que el cielo de la vida llueve sobre mi espalda. Al margen del tiempo, al margen de las estaciones del año. Todo cobra sentido, la cara borrosa de la abuela que me regala inmensas oportunidades de ponerle un rostro que la identifique como mujer y no solo como mi abuela. Espero no equivocarme en reducir la imagen de todas las mujeres en una. Aquella que me daba las nueces o el alma del nogal.

Hace poco hablé con mi madre del tema, ella mi dijo que la abuela paterna estaba muerta cuando nací.

Sueño

 En mis naufragios no echo la culpa a la mala mar Nadie me ha robado la tierra firme Ni el viento me ha empujado O digo que he zarpado del p...